A QIEN PUEDA IMPORTAR

Juanfelipe Martinez El 22 de junio a las 20:28
oye tu no empezaria de otra manera qe no fuera diciendote qe te qiero, por qe en realidad asi es y, tu lo sabes y, no planee qe eso sucediera, mi intencion siempre fue ir a la u y dedicarme enteramente a estudiar, luego apareciste tu ahi una x cualqiera llamativa, exotica si, pero una mas del monton, cuando por vez primera hable contigo me pareciste agradable una buena persona, luego cuando ese dia la pasamos juntos despues de clases y se la montamos tanto a un susodicho personaje qe hasta nos ollo y se dio cuenta, pasamos el trago amargo de su partida con un delicioso jugo de aguacate enfrente de la piscina viendo pasar a aqellos qe modelaban en tanga narizona, y nos reiamos y asi sucecivamente tu tomaste no mas 50 pesos de jugo y a mi me toco mandarme los 950 restantes al buche qe hasta qede mareado. ya sin importar lo otro qe hubiese pasado ya me tenias engatusado y no me explicaba por qe y mi instinto basico primario de cazador cavernicola me incitaba a agarrarte por el cuello y darte un beso salpicado en esos labios de bocachico qe siempre recuerdo y llevo grabados en mis delineados delgados y peqeños labiecitos de niño. sin importar lo qe me dictara el deseo me contuve enteramente por qe albergaba la idea intuitiva de conocerte un poqito mas y asi comprender qe no era solo la impresion de un dia de un momento sino qe eras esa niña niño qe yo mencionaba en la biblioteca qe tanto me gustaban y tu si qe me gustabas mi pez, desde el comienzo en el principio nos extirpamos de comun acuerdo los ojos y fuimos y hasta hoy somos un par de ciclopes entrelazados y nuestra vision es tan corta qe solo nos alcanza para vernos mientras nuestras bocas danzan en una mezcla de saliba esa saliba qe probo tu rostro y la hendidura entre tus tetas. como olvidar qe los gases de la policia lograron por vez primera aguarnos los ojos y fue divertido por qe corriamos de aqi para alla todos chismosos y hasta pareciamos capuchos sin capucha pero era obvio qe la u en su vaiven de verdes y grises mezclados albergando a dos bandos rivales en una guerra sintregua en una batalla campal eran violines prestados desentonados qe amenizaban nuestra velada y reiamos como dos tontos enamorados eso eramos tratabamos de hallar el lugar y el momento para estar a solas y sentados en el segundo piso del bloqe 10 nos dabamos señales en un papel escribiamos garabatos de manera bilingue y jugabamos a la ley del silencio pero nuestros corazones al unisono la rompian por qe latian al mismo compas entrelazados ellos eran tan sencillos y abiertos qe no temian delatarse era obvio las palpitaciones nunca mienten y mientras enrrollaba el pedazo de periodico en mis manos para pegarte y me acercaba a ti y en un momento de debilidad y de pecado qeria era solo abrazarte cobardemente ni lo intente pero me contenia qeria esperar tener mas tiempo para verte reir notar esa carcajada qe se reia de mis pateticos chistes de suso junior. el celador te saludo y tu pusiste una cara de niña perdida en el centro y yo me bole y tu me buscabas luego nos volvimos a encontrar y habia alli una fogata toda revolucionaria qe llamo la lluvia qe nos llevo a sentarnos en una mesa donde nuestros pies se entrelazaron y nuestros rostros estuvieron tan cerca qe un beso era mas qe inevitable pero el sentimiento era mas fuerte eras tu la niña qe yo por tanto tiempo habia esperado y no lo podia creer el momento fue mas qe inolvidable y la memoria esta vez no me falla por qe qedo sincelada en ambos hemisferios de mi cabeza borrarte no es asi de sencillo, facil no es una palabra qe halle en el diccionario de mis convicciones tu eres una manooo de lo mas manooo eres mi manooo mi ciclopa mi bocachico la toche de mi corazon aun novia erez un pez y yo joonas qe aunqe tonto y grosero no merece ser sacado de tus intestinos mi lugar esta en tus tripas en tu estomago y pancreas pero se qe fui un idiota y merezco estar como estoy hoy fuera de ti se qe tu estas mal lo comprendo he aprendido a observarte objetivamente qe caracter posees mujer de envidiar me has dado una leccion de humildad qe jamas nadie me dio ahora entiendo cosas qe no habria podido comprender antes el dolor es fuerte y me eleva me pone de frente ante la verdad todo es tan claro tu no merecias ese trato te juzgue en un principio mal talvez por miedo a qe fueras como las otras pero el otro soy yo y me siento sucio adolorido cabisbajo apenado impotente y con las mejillas empapadas y los labios salados no tenia idea qe las lagrimas fueran tan saladas qe sabor tan extraño hasta ahora lo pruebo.