miércoles, 14 de julio de 2010

todo sin puntuacion

Juanfelipe Martinez El 16 de mayo a las 23:01
comer una sana dedicacion diaria repetitiva como el acto de lavarse los dientes seria mejor abstenerse o ingerir los alimentos sin necesidad de usar la boca que luego adquiere ese olor putrefacto se cansa uno de repetir una accion tan tediosa cargada de una sensacion de insatisfaccion siempre deseando mas abriendo las manos en pos de un plato curtido de comida comida sucia que se deshace y se vuelve polvo nada mas que eso un cumulo de sucio y burdo pantano fangoso origen de todos los karmas de la humanidad para mi es esa cruz que cargamos por ello hoy decidi no comer no abrir ni un paquete de galletas y tenia uno de oreo sobre la nevera pasaba rapidito al baño y las veia como me guiñaban luego exclamaban en leguaje de silvidos que transportaba el viento y rozaban mi quijada como queriendo desencadenar esa tormenta avida en mi ser acaso sera cariño insatisfaccion o que clase de sentimiento mundano el hecho es que sacudi la cabeza y tome ocho vasos de agua si eso creo fueron ocho auque el ultimo me entamborilo y me empezo a doler un poco la panza me recoste queriendo olvidar esa imagen fijada entre ceja y ceja y logre pegar los ojos un par de minutos soñe descaradamente en banquetes comiendo hartandome de todo de pasteles de fritos chorreantes de manteca o bendito colesterol desperte desmemoriado intente recuperar esos datos de alguna manera pero fui incapaz de elaborar un resumen solo quedaba un vago recuerdo de olor a manzanas asadas y el sinsabor de la boca seca de tanta comida pero era sorprendente que eso aconteciera dentro de mis visceras se hallaban almacenados casi 2 litros de inolora y sin sabora agua y se notaba en la redondez de mi estomago era como una especie de gamincito cuando termina con una donacion de caridad en cualquier iglesia del centro de la ciudad y es que realmente era eso apartado de todo dominio me asemejaba mas a uno de esos errantes personajes amos del concreto de la calle en todas sus condiciones que un elocuente estudiante universitario y es que me hartaba y aun habiendo otros que se atiborraban con drogas yo lo hacia apunta de viandas de todas las maneras posibles osaba atragantarme a hurtadillas en mi casa en el atico en el garaje en cualquier sitio que se hallara solo apartado del bochinche de cualquier reunion familiar es mas recuerdo aquella navidad donde me ahogue y solo se vinieron a enterrar todos los presentes porque mis dos deseosos primos alberto y josefa se besuqueaban en la oscuridad de un cuarto de utileria yo me hallaba casi muerto con un taco en la garganta que ni salia ni decidia salir no podia moverme mucho menos hablar pero oia y sentia todo a mi al rededor me patearon inconscientemente sin saberlo y a la ligera en un acto desprevenido se encendio la luz josefa como siempre y sin desmeritar la fama de las mujeres grito insolentemente en barullo de pasos y voces exclamando el por que de aquel suspiro entre tanta felicidad llegaron todos unos con tragos de wisky sin terminar mis tias con buñuelos a medio morder y aun masticando esa masa quesuda en sus bocas mi tio elian bodegon como era conocido se abalanzo sobre mi pecho y en un estrechon de sus manos el taco de chucherias se desprendio del lugar en mi esofago y rapido como un as de luz callo babeante en el piso sobre las baldosas nuevas que mi abuela habia mandado hacer exclusivamente para adornar su elegante petulancia ante sus amigas del club de bingo y cartas en ese momento volvi a nacer una bocanada resonante de vida se adentro en mis pulmones y bombeo vida a todo mi cuerpo lastimeramente el pudor de la situacion era mas doloroso que el mismo hecho de sentirme al borde de la muerte de una manera tan absurda mi tia flor una tonta de mi primera a mi criterio se alejo riendose abiertamente mientras discaba en su celular un numero telefoniko de seguro para llamar a la chismositas de sus amigas para enterarlas de el evento y de paso burlarse de mi y cobrarme con creces todos los desplantes y sinsabores que habia recibido de mi parte mas aun josefa y alberto embadurnados de lapiz labial regado en deredor de sus comisuras labiales no podian esconder la escena de un crimen tan elocuente y disparatado que mi abuela se hecho la bendicion como solia hacerlo cuando algo sobrepasaba esa linea dogmatica de sus principios catolico romanos la mama de josefa la sacudi bruscamente tomandola por su brazo y llevandosela del cuarto y frunciendo el ceño desde la sala los quejidos de una mujer alarmada de sentir a su hija en caso tan aberrante todos se fueron y yo quede alli atiborrado de un complacencia por no haber caido presa de semejante suplicio y descance sobre los baldocines frios alberto aun no se habia incorporado a la jauria ahora era una presa mas parte de mi rebaño todos lo señalarian y lo declararian aun mas culpable que la endemica josefa tres años menor que el y todo estaba justificado para no sentirme el unico culpable de que la noche de navidad se hubiese convertido en una verdadero drma familiar ahora eramos dos indefensos conejo¡illos de indias indecisos de salir de nuestra madriguera alberto se acurruco y como siempre me dio mis respectivos calvasos esta vez acompañandolos de imprecaciones verbales sobre lo acontecido como siempre yo era el rechoncho adolescente indefenso ante todos todo un criminal por crimenes de lesa humanidad a mi propia humanidad si bien era yo quien m e condenaba a padecer las mas sordidas enfermedades y el rechazo social por mi sobrepeso pero no era un acosador de menores de edad y mucho menos de una familiar que eso si valga de decir estaba mas buena que una hamburguesa con doble tocineta claro pero a mi ne me volteaba a ver yo era un cumulo de excremento entre grasa y musculos flacidos poseia todos los sobrenombres posibles para un escolar ademas siempre generaba situacion que asi ameritaban las chapas para no alargarme mas era llamado el panda ya podreis imaginaros la voluminosidad de mi figura aunke el parche en los ojos era ocasionado por grandes ojeras provocadas por esas largas noches de insomnio anhelando comer el refrigerador en casa poseia un candado y para la noche que lo descubri por primera vez hice tanto ruido sin quererlo que hasta mi padre el grna obeso de la familia fue capaz de levantarse de su cama me vocifero cuanta patraña paternal existe para corrgir mis habitos como si su comportamiento fuera digno de servirme de ejemplo pero tenia toda la razon mi madre habia perdido toda confianza en su pequeñin que desde hace años habia dejado de serlo habia crecido descomunalmente ya pesaba alrededor de ciento veinte kilos y con una edad tempranera de diescisiete años impuberes me habia perdido de los mas maravillosos momentos de un adolescente nadie me invitaba a ser parte de el equipo de futbol o de ningun otro tipo de deporte en las clases de recreacion pasaba contrabando desde la cafeteria metida en un bolsillo que yo mismo habia cocido con hilo a mano que le robe a la empleada del servicio y luego deje olvidada en un sofa de la sala y que fue hallada por el trasero de uno de mis hermanos a la empleada la despidieron y obviamente yo no me atrevi a decir nada paaba pasteles y deditos de queso que se ajustaban al espacio disponible el maestro con su gorrita me descubria con borbotones de comida en la boca sin tragar y me la hacia escupir y luego pasaba tutorearme unas cuantas abdominales que contaba con una energica voz militar

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